martes, 6 de marzo de 2007

Mi primera convención (y II)

Asi que ahí estaba yo, en una fiesta gay, pagada por el banco, rodeado de gente que seguramente sabía más que yo de banca y tendrían mejores resultados comerciales. O no. Eso es una convención de externos del banco, en apariencia.
Después de la comida en que comimos bien, pero no demasiado ( muy mala idea poner un vino catalán estando como estabamos en Jerez ), empezamos con las conferencias. Las dos primeras eran típicas, "Así es nuestro banco" y " asi somos nosotros". Esto en castellano es lo siguiente: ole nuestros huevos, que buenos somos, tenemos la mejor calidad del mercado, nuestros clientes nos aman, tenemos sangre del banco y un alto grado de pertenencia a la organización; un mensaje tipo " somos- la- secta- y-venimos -a -redimir- el - mundo -a- través- de -la- banca". La segunda conferencia "asi somos nosotros" por no enrollarme venia a decir algo asi como "os -hacemos -el -gran -honor -de -uniros -a -nuestra- secta.-seréis -muy -felices." Hasta ahora todo normal, no diré que me lo esperaba, pero entraba dentro de lo normal. Ahora vendrían las conferencias con contenido...
"Objetivos para este año", nuevamente resumo para no entrar en tecnicismos "habéis -sido -malos -chicos -y -no -habeis -vendido -demasiado, -pero -os -damos -otra -oportunidad -si -vendeis -el -doble -en -lo -que -queda -de -año".
"Productos" : nuestros productos son los mejores y si la gente no los compra es porque sois malos vendedores, además el líder de la secta dice que este y este otro producto son los que más teneis que vender, y me importa una mierda que el cliente los necesite o no.
Empezaba a sentirme incómodo, con ganas de marcharme, y entonces empecé a relacionarme de veras con más gente, a charlar y contar chistes, y descubrí que ellos, mis compañeros, tampoco querían llevar chaquetas, que no tenían grandes resultados con este negocio y se dedicaban a otra cosa además de esto, para comer, que se aburrían soberanamente y como dijo uno de ellos. "Yo estoy aquí por la comida y el hotel, que son gratis". Se me quitó todo el complejo.
Así, luego fuimos a una visita guiada por las bodegas Domecq, que es una cosa que hay que hacer una vez en la vida. Nos hicieron un espectaculo que consisitía en una chica bailando algo parecido a las sevillanas con un caballo (precioso, magnífico e íncreible) aquellos que eran del norte estaban flipando con el tema y va Angel de Jaén y me dice algo como: "Fíjate si estoy mal, que miro más al caballo que a la chica". Y empezó la boda...
La boda consistió en unos aperitivos, unos vinitos, una gran cena con más vino y un Dj amenizando la barra libre. Fue una boda un poco sosa, ya que no había apenas chicas con las que bailar. Eran 6 ó 7, que bailaban en el centro de dos anillos concentricos de tíos de toda edad y estado social. Era algo tan patético, que empezé a reirme (sí, también era por el vino) y empezamos a hacerle fotos a la camarera con los móviles y pedirle que nos la dedicara. Gracias a Dios, la boda acabó pronto, nadie quiso alargar la noche de manera artificial y nos fuimos a dormir al hotel.
A la mañana siguiente hubo otras dos conferencias, sobre productos especificos del banco, pero nosotros estabamos ya con resaca, apenas recuerdo nada solo que se me hicieron tan laaargas. Y nos fuimos a nuestras casas.
Espero que no os hayais aburrido mucho con esta entrada, pero si teneis que ir alguna vez a una convención, y seguro que alguna vez ireis, que sepais que vais a encontrar. En fin, que todo los miedos, sensaciones de perder el tiempo, guergas en jueves a costa de otro,...todo es normal. Para eso se hicieron las convenciones, o acaso pensabais ¡oh ingenuos! que allí se trabajaba.

3 comentarios:

Rictus Morte dijo...

Así que voy a encontrar un montón de tíos haciéndole embobados el corro a unas señoritas. Y a mí que me da que esto lo veo a menudo... Claro, cuando sólo hay unas pocas señoritas, no necesitan ser guapas siquiera. Y claro, cuando los tíos están bebidos, puede que no necesiten ser señoritas, les vale hasta un caballo... ;)

gilgamesh dijo...

No te preocupes Rictus, contrataremos 100 chicas que te hagan un corro y las emborracharemos.Así, tú tampoco necesitaras ser guapo para triunfar.
Además, sería una experiencia que nunca olvidarías...
Mejor pensado, ese día me quedo contigo, y así yo tampoco necesitaré ser guapo.

Anónimo dijo...

Hola gilgamesh, me ha parecido muy divertido tu post, ya veo como ves las cosas, con mucho sentido del humor, me gusta mucho.
Gracias por explicarme como son las convenciones, yo todavía no he ido a ninguna.
saludos