no lo dije...o cambio de vida 2ª parte

Sé que estuvo mal, y claro, sin esta información no se comprende la entrada anterior, pero es que con un poco de pudor y otro mucho de ilusión y esperanza, os participo que en enero nacerá un "gilgameshito", de sobrenombre Ignacio.

Quizá así entendais el estado de alucinamiento permanente en el que estamos inmersos mi mujer y yo. Para que me entendais, me resulta muy muy fuerte escribir algo como "voy a ser padre", "voy a tener un hijo" y cosas así. Pero claro, es que tampoco estoy acostumbrado a decir "mi mujer", "mi esposa"...cuando digo este tipo de palabras, no puedo evitar tragar saliva y que el corazón "me haga un extraño".

Quizá algún día me acostumbre al vértigo de mi nueva vida..

lo que esconde el día a día

Como pareja de recién casados, algunos me preguntan que tal la nueva vida que estamos viviendo. Así, para que vosotros os hagais una idea, o cuento lo que viene a ser un día normal de matrimonio para mí.

Nos levantamos, ella a las 7 y yo a las 7.30, me preparo el desayuno y despido de ella que se va al curso de jardineria que está haciendo. Leo las noticias y me voy al trabajo hasta las 2, que vuelvo a casa y preparo la comida, ella regresa almorzamos y luego tomamos un café, hasta que me vuelvo al trabajo, del que regreso sobre las 8 de la tarde, compro algo que necesitemos para la casa, y veo algo en el cinetube o seriesfrikis mientras ella acaba de estudiar, cenamos, charlamos y a la cama. Por la tarde, mientras yo trabajo, ella limpia algo la casa y estudia.

Como veis, es bastante normal, nada espectacular, sin grandes historias que contar ni grandes emociones diarias. Nada de un éxtasis de felicidad.

Las pocas novedades en esta vida vienen a ser del tipo "ha llamado Rictus", "¿cuando veremos a mi madre?", recetas de cocina nuevas, cosas que estamos ordenando en nuestra casa, etc...

Pero no os miento, que éstos están siendo los días más felices de mi vida.